¿Quién evitó la rubeola?

El mismo día que se apaga la vida de una gran enfermera, Marjory Gordon, se apaga la sombra de una enfermedad vírica, la rubeola, en todo un continente, el mismo en el que nació dicha enfermera.

Demos un semblante , de la enfermedad claro:

• La rubéola es una infección vírica contagiosa, por lo general leve, que afecta principalmente a niños y adultos jóvenes.
• La infección por rubéola en las mujeres embarazadas puede causar la muerte del feto o defectos congénitos en la forma de síndrome de rubéola congénita (SRC).
• Se calcula cada año nacen en el mundo aproximadamente 110.000 niños con síndrome de rubéola congénita.
• No se dispone de un tratamiento específico para la rubéola, pero la enfermedad es prevenible con vacunas.

Con este, América, pone su tercer hito en la erradicación de infecciones prevenibles con vacunas: 1971 viruela, 1994 poliomielitis. En Europa nos vemos enfrentados a rebrotes de este tipo de infecciones con frecuencia (véase post anterior: ¿De quién debemos preocuparnos las enfermeras? Una muerte en Alemania por sarampión). Es curioso que el viejo continente, mucho más horadado por el positivismo y el racionalismo ilustrado, origen de las ciencias que han permitido el conocimiento y prevención de enfermedades, se enfrente a esta situación. Esto se presenta en oposición al prejuicio, justificado o no, sobre las dificultades que ofrece la multietnicidad americana, sobre todo latinoamericana, para recibir vacunas y asimilar medidas preventivas en zonas remotas y con escasos recursos. ¿Quiénes son sujetos y objetos de este prejuicio, a la vista de los resultados?

¿Y las enfermeras?

0En su nota la OPS , por otra parte, señala a los actores en este proceso:

Los socios claves en la eliminación de la rubéola al igual que del sarampión incluyen a los ministerios de salud de los países miembros de la OPS/OMS, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, Salud Canadá, la Agencia Canadiense para el Desarrollo Internacional (CIDA), la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), el Instituto de Vacunas Sabin, el Instituto Serum de India, March of Dimes, la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, y la Iniciativa Sarampión-Rubéola, una coalición de socios globales, incluyendo la Federación Internacional de la Cruz Roja/Media Luna Roja, la Fundación ONU, UNICEF y la OMS.

Las enfermeras y la población no son citadas en el texto como actores, ni claves ni secundarios, no son citados. La población, su voluntad, conocimiento e iniciativa son el pilar fundamental de cualquier medida comunitaria que requiera como esta, una participación masiva. Las enfermeras tienen un papel conocido por todos los que puedan leer este post. Desde luego que los “socios” citados en el extracto son importantes, esenciales en muchos casos, pero ¿no lo son la población y la enfermería ante una enfermedad prevenible con vacunación? ¿No merecen una mínima referencia? ¿Qué ha sucedido con el número de enfermeras que pertenecen a la OMS o la OPS en los últimos años?

José David Sánchez Melero

Autor José David Sánchez Melero

Cuaderno de bitácora de un enfermero de primaria para preservar los pensamientos de las inclemencias del mar de información en el que la enfermería navega.

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